La explicación común y lo que por lo general suelen reiterar aquellas empresas que se encargan de gestionar asistentes virtuales como lo son por ejemplo, Samsung, Apple, Amazon y por supuesto Google, consiste en que las conversaciones que tienen lugar entre los usuarios y sus asistentes resultan completamente privadas; además de que la interacción se lleva a cabo de forma exclusiva a través de inteligencia artificial, lo que significa que los robots son los únicos que “escuchan” a los usuarios.
¿Nos está espiando Google?
Y aunque en un comienzo esto se trata de una práctica legal, lo cierto es que hace poco Google admitió que mediante los micrófonos, sus trabajadores escuchan las grabaciones privadas de las conversaciones que sus clientes realizan mediante Google Assistant, del mismo modo que ocurrió anteriormente con Amazon Alexa.
A través de su blog oficial, Google defendió la práctica que supone permitir que sus empleados escuchen las grabaciones de audio llevadas a cabo por sus clientes a través de los altavoces inteligentes que posee Google Home.
De este modo, los especialistas en lenguaje se dedican a analizar los “fragmentos” de estas grabaciones, asegurando que revisar aproximadamente un 0,2% de las grabaciones, es de ayuda para optimizar los sistemas de reconocimiento de voz mediante inteligencia artificial.
No obstante, reveló igualmente que varias de las grabaciones fueron previamente filtradas en los Países Bajos por algún empleado.
Dicha situación ha causado que numerosas personas comiencen a cuestionar mediante las redes sociales, cuál es el tipo de información que realmente recopilan los altavoces inteligentes, como lo son por ejemplo, tanto Google Home como el ya mencionado Amazon Alexa.
¿Qué grabaciones escucha exactamente?
Google señaló que el asistente virtual únicamente les hace llegar las grabaciones de audio, cuando se detecta que los usuarios se encuentran interactuando con el mismo, después de decir, por ejemplo “Hey, Google”; mencionando igualmente que cuenta con diversas herramientas que previenen las “falsas activaciones”.
Dicho de otra forma, evitan que el software pueda interpretar de forma errónea algún sonido, por ejemplo, la palabra clave necesaria para activarse.
No obstante y de acuerdo con la popular compañía, el asistente de voz en algunos casos llega a activarse accidentalmente, por lo que las grabaciones podrían ser enviadas hacia los empleados que se encargan de analizarlas; lo cual se podría traducir como que los trabajadores tienen la posibilidad de tener acceso a conversaciones que no tenían como propósito ser grabadas.
Es decir, el altavoz inteligente tiene la capacidad de grabar tanto conversaciones privadas como momentos íntimos y después enviárselos directamente a los revisores de Google, aunque los usuarios no se percatan.
Cada uno de los revisores suele escuchar y analizar alrededor de 5.000 grabaciones por semana los cuales, hay que decirlo, ni siquiera se tratan de trabajadores de Google, ya que son freelancers y/o contratados por alguna tercera empresa.
¿Es posible que se filtren las conversaciones privadas de los usuarios?
Google indica que las grabaciones son enviadas anónimamente antes de llegar a ser enviadas hacia los analistas y aunque en relación a Amazon Echo no existe evidencia de que una de las grabaciones grabadas fuese filtrada, lo cierto es que en cuanto a Google concierne, esta se trata de la primera vez que reconoce un incidente de esta clase de forma pública.
Hay que mencionar además que Google aseguró encontrarse investigando lo sucedido, sin embargo, todavía no es claro qué cambios serán llevados a cabo, en caso de haberlos. Esto tiene relación con muchos negocios online actuales, ya que pueden ver afectada su confianza por culpa de Google.
De igual modo y mediante su blog oficial, la empresa señaló que fueron activados sus equipos de Seguridad y Respuesta de Privacidad, de manera que los mismos se encuentran investigando para poder tomar medidas en relación a las grabaciones que fueron filtradas en los Países Bajos.
Anunció también que se encuentran realizando una completa revisión dentro de dicho espacio con el fin de impedir que suceda nuevamente una inadecuada conducta igual a esta.
¿Se puede evitar que nos escuche?
Los altavoces inteligentes siempre tienen que encontrarse escuchando a fin de que puedan funcionar, debido a que escuchan continuamente para poder ser capaces de detectar el comando o palabra que los active.
Esto no quiere decir que se mantengan grabando siempre, pero no se puede negar que un micrófono que esta encendido constantemente se trata de un objetivo bastante irresistible para los hackers.
Google asegura utilizar los estándares de seguridad más elevados con el propósito de impedir que terceros puedan escuchar, pero tal y como las revelaciones recientes de la empresa lo demuestran, eso no evita que los trabajadores escuchen grabaciones y además, las compartan.
En este sentido y mediante su blog señalo que se comprometen con elevados estándares tanto de seguridad como de privacidad dentro del desarrollo de productos, al mismo tiempo que se encargan de garantizar que sus clientes se mantengan en esos mismos estándares.
Además, les ofrecen herramientas que permiten controlar y administrar los datos que almacena su cuenta, teniendo así la posibilidad de desactivar totalmente el almacenamiento de datos de audio de su cuenta de Google u optar por eliminarlos de manera automática después de 3-18 meses.
¿Por qué Google hace esto?
En un comienzo, Google hace esto con el fin de optimizar la calidad que posee su sistema de reconocimiento de voz a través de la tecnología de aprendizaje neuronal con la cual trabaja la empresa.
Sin embargo, parece que las escuchas poseen igualmente otra función: monitorizar la actividad de sus usuarios para ofrecerles publicidad sobre productos que podrían ser de su interés.
