Es evidente la evolución de la odontología en estos últimos años. Esta disciplina ha dado lugar a todo tipo de innovaciones, tratamientos y prestaciones basándose en la demanda y en las necesidades de la salud bucodental.
Desde los inicios de la humanidad, el hombre y la mujer siempre han buscado la forma de mantener una sonrisa y una apariencia que se adecue a la estética de la sociedad. A día de hoy, los cánones de belleza son bastante exigentes, la necesidad de cumplir con ciertas expectativas es algo que se aprecia en la sociedad del siglo XXI.
La estética dental ha surgido por las necesidades de la sociedad moderna, ofreciendo una solución estética y sanitaria. La belleza dental es un anhelo de cualquier cultura y civilización; la sonrisa es una de nuestras principales cartas de presentación y, por ello, la forma y el estado de ésta es importante para nuestra imagen.
El sector de la odontología se ha reinventado ofreciendo revolucionarios y satisfactorios tratamientos de gran eficacia, durabilidad y resistencia para abastecer las demandas de la sociedad. Uno de los tratamientos estrella en estética dental es Invisalign.
Invisalign tiene como objetivo la corrección y rehabilitación de la morfología bucal mediante unos alineadores invisibles e imperceptibles que surgen de la innovación de los antiestéticos e incómodos braquets. La facilidad y la comodidad de este tratamiento es evidente y cada vez más personas optan por estos alineadores para restaurar la posición dental con tal de ofrecer una imagen equilibrada, sana y funcional.
La evolución del sector odontológico es evidente en la innovación de tratamientos ofreciendo una amplia gama de posibilidades. Las innovaciones en cuanto a sistemas, técnicas y herramientas tecnológicas han dado lugar a la revolución de un sector que se ha visto abrumado por la demanda.
Esta innovación, sin embargo, no tan solo surge de la revolución tecnológica sino que también por la competitividad estética de nuestra sociedad moderna. La estética oral es una de las grandes preocupaciones de nuestra sociedad y por ello se han llevado a cabo distintas investigaciones y avances para abastecer estas inquietudes.
La odontología estética, por tanto, nace a través de estas preocupaciones de belleza pero también constituye un método para mejorar y perfeccionar nuestra salud bucodental. Es decir, apariencia y salud se combinan dando lugar a esta rama de la odontología: la estética dental.
No gozar de una armonía bucodental puede conllevar graves problemas psicológicos en el individuo, convirtiéndose en alguien introvertido y con baja autoestima tal y como apuntan diversos estudios sociológicos y psicológicos.
Es evidente que nuestra estética bucal no lo es todo; la belleza no reside en nuestra boca o en nuestro aspecto físico. La belleza es un conjunto de cualidades estéticas y personales que se combinan y crean una imagen armónica. Lo que sí que es cierto es que la estética bucodental es importante cuando afecta en demasía nuestra salud emocional, funcional y física. A día de hoy encontramos tratamientos ajustados a todo tipo de bolsillos para abastecer las necesidades de cualquier individuo, para ello es importante acudir a un centro profesional y de calidad para garantizar unos excelentes resultados.
